El Mtro. Edgar Ángeles Cordero, titular de la Dirección Académica de Ciencias de la Tierra de la Universidad Olmeca, nos da una explicación con respecto a la causa de los sismos ocurridos el pasado 7 y 19 de septiembre que afectaron a varios estados de la República Mexicana.
Por Edgar Ángeles Cordero
El territorio nacional está dentro de una zona tectónicamente activa donde la mayor parte del territorio continental se encuentra en la placa Norteamericana, la cual es subducida por las placas de Cocos, la placa del Pacifico y la micro placa de Rivera en la parte central y en la parte más sur del país por la placa del caribe. Figura 1. El movimiento relativo entre las placas es permanente y es monitoreado a través de la red de estaciones sismológicas del Servicio Sismológico Nacional.
En ocasiones la alta fricción o cambios en las condiciones de desplazamiento relativo provocan que se generen desplazamientos bruscos que son de carácter aleatorio y esporádico como los recientes sismos del 7 de septiembre de magnitud 8.2 ° localizado al suroeste de Pijiapan, Chiapas y el más reciente de este pasado 19 de septiembre de magnitud 7.1° al sureste de Axochiapan, Mórelos. Ambos eventos originados en la placa subducida de cocos a profundidades de 58 y 57 km de profundidad respectivamente, presentan mecanismos de generación similares pero son eventos sísmicos no relacionados entre sí, puesto que uno se origina en el Golfo de Tehuantepec y el segundo por debajo de la Faja Volcánica Transmexicana.
Los recientes eventos del pasado 19 de septiembre son originados por la proximidad del epicentro del sismo al centro del país, mientras que el epicentro del sismo del día 7 de septiembre se encontraba mucho más lejos, por lo cual aunque fue de mayor de magnitud, la proximidad fue la causa principal de su alto impacto.
Derivado de los últimos sísmicos pasados, es muy importante apegarse a la normatividad del reglamento de construcción, para evitar daños severos en las construcciones.
* El Mtro. Edgar Ángeles Cordero egresado de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) como Ingeniero Geofísico, con mención especial; cursó la Maestría en Enseñanza de las Matemáticas en el Instituto Universitario de Puebla (IUP), obteniendo la máxima distinción académica “Suma cum Laude”. Actualmente es Doctorante en el IUP en el programa de Doctorado en Ecoeducación.
