Eduardo Hernández Hernández
La educación superior será siempre el centro del engranaje en la formación de los recursos humanos que además de profesionales en el intelecto de sus valores son factor de una sostenida evolución humana entre el colectivo social, asumiendo el liderazgo de las decisiones asertivas para el bien común. La Universidad Olmeca emergió el 19 de se septiembre de 1991, hace ya tres décadas, con el compromiso de contribuir a este propósito con las instituciones públicas de Tabasco.
Erigirse como opción a partir de su originaria oferta educativa diversificada en el tiempo para los jóvenes que arraigaron aquí las bases de lo que hoy son, orgullosos profesionales que comparten un mismo ideario en el que participan de sus logros a la sociedad en la que se hallan insertos.
Un legado, la Universidad Olmeca, que a iniciativa de David Gustavo Gutiérrez Ruiz y del extinto Diego Rosique Palaviccini sumaron 30 notables tabasqueños quienes con convicción abrazaron este trascendental proyecto, el que una vez constituido a la distancia de 30 años mantiene permanente su esencia; pionera también en el visionario horizonte de oportunidades introducida en diversas disciplinas con la determinación de sus audacias demandadas en los tiempos y circunstancias contemporáneas, más allá de las tradicionales que mantienen su importancia.
Raíz de sabiduría, el lema institucional, de aproximados 6 mil profesionales forjados quienes desde su ámbito de desarrollo y crecimiento profesional se incorporaron aun en la medianía de su proceso formativo, mostrándose en sus capacidades y competencias hacia la permanente aspiración en el particular desarrollo y crecimiento humano.
La Universidad Olmeca es poseedora de una singularidad en la dicotomía de origen conceptualizada como una institución de estudios superiores de carácter privada, sin lucro económico alguno, ni siquiera de los 30 tabasqueños quienes aportaron el capital sin tener retorno alguno. Se mantiene esencialmente de la colegiatura de sus estudiantes; en licenciaturas escolarizadas, mixtas, y posgrados, incluyendo la educación permanente de cursos, seminarios y diplomados.
En el discurrir del tiempo el campus universitario ha tenido por principio el debate de las ideas, el libre criterio del pensamiento que se nutre permanentemente, siendo que aquí se forjan jóvenes venidos de entidades regionales y de México, así como de otras naciones quienes en común son una misma familia.
Un vínculo que en la era tecnológica, de la comunidad de esta raíz de sabiduría les tiene entrelazadas, que también ha sido plataforma para gestar proyectos de emprendurismo los cuales una vez afianzados se suman a la cadena de valor, impactando a la estructura socioeconómica.
Personalidades que en el coexistir de sus disruptivas visiones, en el liderazgo individual y colectivo tiene la virtud de asumir decisiones tan delicadas como trascendentales en el ámbito de la iniciativa privada como de la administración pública gubernamental.
Una comunidad, la Olmeca, que en el dinamismo de la filosofía de formación integral no se limita. Por lo contrario, enfrenta las ineludibles adversidades en la consecución de los propósitos, con la aspiración de ir por más, trascender en el legado, aparejado por una permanente actualización y adquisición de los argumentos interdisciplinarios del conocimiento.
El colectivo de los frutos de la raíz de sabiduría en la visión interdisciplinaria se fortalece cada vez más; las entre las ciencias humanas, económicas administrativas, ingenierías, ciencia de la tierra, ciencias de la salud, entre otras que le dan la razón del ser institucional, la genuina rentabilidad para el núcleo social de Tabasco que por la naturales áreas de oportunidades escaladas hacia el plano nacional e internacional, en el reconocimiento por sus aportes en el liderazgo.
Pero que en lo absoluto se desligan sino que mantienen esta sinergia con sus orígenes de formación, esta que les inculcó el ideario de una filosofía profesional, el entramado de un modelo de vida que les prestigia a ambos, donde vayan. El lustre de este sello brilla con la luminosidad de los talentos.
En palabras de David Gustavo Gutiérrez Ruiz, Coordinador General del Consejo de Fundadores y Presidente de la Junta de Gobierno, “Esta Universidad Olmeca está planteada no en términos de utilidades sino de servicios”.
Una Institución de Estudios Superiores de vocación social que asimilando los desafíos en una globalizada aldea mundial ha sabido asociarse con universidades de países europeos y también de Estados Unidos y Canadá, con la visión de fortalecerse mutuamente en los contenidos de sus programas educativos, así como el intercambio de estadías de las comunidades estudiantiles.
La Universidad Olmeca en la vigencia y posterioridad de sus 30 años se transformado en cuatro escuelas, de entre las que sobresale la Escuela de Educación Permanente y a lo Largo de la la Vida, que da cabida a todas las edades y generaciones, con la diversidad de opciones que lo mismo involucra a adolescentes como a mayores de edad, entendiendo que el conocimiento como el tiempo sigue avanzando en el dinamismo del existir propio.